SISTEMA VAPOR DE AGUA BPH

Nuevo tratamiento mínimamente invasivo para la Hiperplasia Prostática Benigna Vapor de Agua, es un sistema de tratamiento endoscópico que consiste en la inyección de vapor de agua en la próstata, lo que provoca la necrosis (muerte celular) del tejido , que es después eliminado por el propio cuerpo, solventando los problemas obstructivos ocasionados por el crecimiento de la próstata en los pacientes como son pérdida de fuerza del chorro, goteo post miccional, dificultad para iniciar la micción, sensación de vaciamiento incompleto aumento de la frecuencia miccional tanto de día como por la noche.

La intervención se realiza a través de la uretra de manera ambulatoria, no requiere ingreso hospitalario y sin necesidad de anestesia. El tratamiento se realiza con sedación y tiene una duración de 5-15 minutos.

Una vez terminado el procedimiento el paciente es dado de alta con una sonda durante unos 5 días, que le será posteriormente retirada.

Los efectos empiezan a apreciarse desde las dos semanas y llegan a su máximo a los 3 meses manteniéndose en el tiempo.

Los resultados son persistentes en el tiempo, sólo el 4,4% de los casos precisó un retratamiento durante los cuatro años posteriores. Al tratarse de una intervención mínimamente invasiva, se reducen también los riesgos asociados y los efectos secundarios.

Por ello es una técnica muy segura y eficaz que la hace idónea en pacientes de edad avanzada, pacientes complejos con múltiples patologías y de alto riego que no pueden ser sometidos a anestesia. los efectos secundarios. No se produce Incontinencia de Orina (<0,1%) ni Disfunción eréctil (Impotencia sexual) y consigue la preservación de la eyaculación en el 98%. No hay sangrado post tratamiento por lo que se evitan transfusiones.

Esta técnica, conocida como sistema REZUM, es totalmente innovadora y mínimamente invasiva , se basa en la inyección de vapor de agua (se alcanza una temperatura de 103 ºC) en la glándula prostática mediante un instrumento similar a una pistola que provoca la necrosis del tejido. El propio cuerpo se encarga de eliminar el tejido muerto, con pocos efectos colaterales y con una muy buena tasa de éxito.

El tratamiento se realiza bajo una sedación consciente, por lo que el paciente permanece despierto sin notar absolutamente nada pero sin estar anestesiado. Una vez que el se ha realizado la sedación, el urólogo introducirá la punta del sistema a través de la uretra, y gracias a una cámara de vídeo de alta resolución se puede ver la posición exacta a tratar, justo antes de entrar en la vejiga.

Al alcanzar ese punto, justo en el tramo prostático de la uretra, se introduce la aguja en las zonas de la hiperplasia elegida y se inyecta el vapor de agua. Esta emisión de vapor se mantiene durante unos segundos, y posteriormente se retira de la uretra, lo que concluye la intervención.

El paciente es dado de alta con sonda vesical que debe llevar de 3-5 días dependiendo del volumen de la próstata.

Esta técnica, ha supuesto una revolución en el campo de la urología y del tratamiento de la hiperplasia benigna de próstata por sus muchas ventajas:

  • Es mínimamente invasivo, sin necesidad de anestesia.
  • Es un procedimiento ambulatorio, paciente es dado de alta a la hora.
  • Es rápido , no excede de 30 minutos
  • Conserva la función sexual
  • Es casi definitivo.
  • Es un procedimiento eficaz y seguro.
  • Es totalmente indoloro.
  • Su recuperación es sencilla y rápida.
  • Mejora marcadamente la función urinaria.
  • Preserva la función eréctil y la eyaculación.

En algunos casos pueden observarse efectos secundarios de poca intensidad como irritación miccional y aumento de la frecuencia miccional que desaparecen a los pocos días.